PRACTICANDO YOGA
Recuerdo cuando hace unos cuantos años, más de una docena, conocí la práctica del yoga. Siempre me ha costado sincronizar, cuando probé el aerobic (tan de moda hace 20 años, como ahora el pilates), era un verdadero desastre. Con el yoga, me encontraba con el dilema de mover mi cuerpo (bastante poco dado al ejercicio) y además combinar con la respiración.
Varias veces a lo largo de esta última década lo intenté, en serio, costandome tanto, que a punto de tirar la toalla estuve. O sin a punto, lo hice.
Cuando se me presentó la oportunidad de formarme como monitora de Yoga para Embarazo y Crianza, con Imma Campos, no lo dudé. Deseaba con todas mis fuerzas, darme la oportunidad de conseguirlo.
Ya había tenido oportunidad de conocerla en dos seminarios de mi formación de doula, y sentí que esta vez, sí, podia ser diferente.
A una edad ya madurita, podría parecer que esta labor se haría difícil, pero tengo que decirte, que no fue así.
Desde el primer seminario de la formación, me sentí totalmente identificada con la práctica, respirando, flexibilizando mis articulacíones, fortaleciendo la musculatura, sintiéndome dia a dia más ligera, sintonizada con mi cuerpo, mi mente, mi ser.
Compartirlo con mujeres, parejas, familias, es mi mayor regalo. Sin olvidarme de mi agradecimiento a la profesora, Imma, y a todas las mujeres preciosas que compartieron la formación conmigo en La Vall d´Uixo.
Y ahora hermosos seres, a practicar. Me permito prometeros placeres indescriptibles, fluires y sensaciones que integrareis de por siempre.
Recuerdo cuando hace unos cuantos años, más de una docena, conocí la práctica del yoga. Siempre me ha costado sincronizar, cuando probé el aerobic (tan de moda hace 20 años, como ahora el pilates), era un verdadero desastre. Con el yoga, me encontraba con el dilema de mover mi cuerpo (bastante poco dado al ejercicio) y además combinar con la respiración.
Varias veces a lo largo de esta última década lo intenté, en serio, costandome tanto, que a punto de tirar la toalla estuve. O sin a punto, lo hice.
Cuando se me presentó la oportunidad de formarme como monitora de Yoga para Embarazo y Crianza, con Imma Campos, no lo dudé. Deseaba con todas mis fuerzas, darme la oportunidad de conseguirlo.
Ya había tenido oportunidad de conocerla en dos seminarios de mi formación de doula, y sentí que esta vez, sí, podia ser diferente.
A una edad ya madurita, podría parecer que esta labor se haría difícil, pero tengo que decirte, que no fue así.
Desde el primer seminario de la formación, me sentí totalmente identificada con la práctica, respirando, flexibilizando mis articulacíones, fortaleciendo la musculatura, sintiéndome dia a dia más ligera, sintonizada con mi cuerpo, mi mente, mi ser.
Compartirlo con mujeres, parejas, familias, es mi mayor regalo. Sin olvidarme de mi agradecimiento a la profesora, Imma, y a todas las mujeres preciosas que compartieron la formación conmigo en La Vall d´Uixo.
Y ahora hermosos seres, a practicar. Me permito prometeros placeres indescriptibles, fluires y sensaciones que integrareis de por siempre.
